Los eventos de empresa, que las empresas grandes reservan a directivos, accionistas, y medios sociales ya no sirven como modelo de eventos de comunicación de las empresas actuales y modernas.
Cada vez son más las empresas que saben reconocer el talento y el esfuerzo de las personas que trabajan para ellos, sean muchas o pocas, trabajen a distancia o presencialmente, más allá de las ventas, del departamento a que pertenezcan o del tiempo que lleven.
Por eso organizar un evento para las personas que trabajan para la empresa es una de las mejores opciones que existen actualmente como más valorada por su carga emocional y humana. Un evento de este tipo hace más por la imagen y confianza de la empresa que muchas campañas en hora de máxima audiencia en cualquier canal de televisión dirigidas a nadie en especial.
Si la empresa cuenta con diferentes sedes regionales puede realizarse el evento en cada una de ellas y dejar que se vean on-line las celebraciones de todas ellas a la vez.
Los formatos que más éxito tienen son los aperitivos o degustaciones gastronómicas informales, donde además se fomenta el encuentro entre departamentos y equipos de trabajo en un ambiente alejado de sus cubículos. Es recomendable que se celebre el evento dentro del horario laboral para contar con la disponibilidad de todos y que no se considere recuperable el tiempo invertido en fomentar el sentimiento de permanencia, la motivación de las personas trabajadoras y el compromiso de la empresa con su plantilla.